Practica con antelación. Prepárate de antemano realizando test de prueba que puedes encontrar en Internet. Irás más confiado si te haces una idea previa de a lo que te vas a enfrentar. A los seres humanos nos encanta tener sensación de control en la mayoría de los contextos de la vida y este no puede ser menos, así que ENTRÉNATE. Con la práctica puedes mejorar los resultados hasta un 30%.
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Controla los nervios. Este tipo de test genera bastante ansiedad y todos sabemos que los nervios no son buenos consejeros. Sabemos que es una recomendación fácil de dar pero difícil de controlar, aun así intenta relajarte. Procura mantener un nivel de excitación suficiente como para sentirte despejado pero no alterado. No haga comidas pesadas ni tomes café, alcohol o medicamentos que te estimulen demasiado. Y por supuesto, sé puntual.
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Lee y/o escucha las instrucciones detenidamente. Es importante no leerlas a la ligera puesto que puede provocar errores sustanciales que te harán quedarte fuera del proceso selectivo. ..Y no solo dedicarle tiempo a las instrucciones, sino también a los enunciados de cada una de las preguntas y posibles respuestas. Muchas veces preguntan lo mismo de distinta forma solo para “pillarte”.
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Revisa el test antes de comenzar. Es recomendable que le eches un vistazo rápido a las cuestiones para hacerte una idea de la extensión del test y de la dificultad. Te ayudará a organizarte mejor el tiempo del que dispones. No te desanimes si ves que no te da tiempo a contestar todas las preguntas pero no le dediques demasiado a determinadas cuestiones. Si una pregunta se te resiste, déjala. El entretenerte demasiado hará que no puedas contestar otras. Si al final te sobra tiempo podrás repasar aquellas en las que tengas dudas o no hayas podido responder en un primer momento.
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Trabaja deprisa pero con seguridad. Este tipo de pruebas cuenta con una duración limitada para realizarlo, por lo que no pierdas el tiempo con distracciones innecesarias. No te olvides de que estás compitiendo por un puesto de trabajo y que cualquier interrupción puede tener como consecuencia que otro/a aspirante consiga el trabajo. Intenta conseguir el mejor resultado, así que preocúpate solo por el test que tienes delante.
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Sé sincero/a al contestar. ¿Es posible “engañar” en un test psicotécnico? Podrías intentarlo pero nuestro consejo es que no lo hagas, puesto que es muy probable que lo detecten rápidamente. Este tipo de test suele incorporar una escala de sinceridad que mide el nivel de falsedad en las respuestas. Es lo primero que mirarán los examinadores y si no alcanzas un grado determinado, quedarás excluido/a automáticamente, no valorando el resto de tus respuestas. Pensarán que, al intentar distorsionar tu imagen, no eres la persona adecuada para incorporar en su empresa.
Es verdad que algunas cuestiones pueden resultarte comprometedoras. Puede ser muy común que nos encontremos con preguntas del tipo “¿Mientes?”. En ese caso, nuestra recomendación es que no se te ocurra, para dar una buena imagen, contestar “Nunca”. Los examinadores sabrán que estás mintiendo…Es una condición innata de todos los seres humanos.
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“Mójate” en tus respuestas. Si piensas que, en un test psicotécnico sobre personalidad, es bueno seleccionar la opción intermedia en casi todas las respuestas (por ejemplo, “ni en desacuerdo ni de acuerdo”), te equivocas. Con esa actitud solo conseguirás que la empresa te descarte del proceso selectivo al no poder predecir cuál será tu comportamiento una vez incorporado.